Si os animáis a incluir en la dieta de vuestros hijos algunos alimentos para fortalecer el sistema inmunológico podréis aumentar sus defensas y conseguir que crezcan sanos y fuertes.
Y es que el sistema inmunológico se ocupa de luchar contra las bacterias y los gérmenes que provocan la aparición de infecciones, por lo que recurrir a hábitos e ingredientes que lo refuercen en fundamental no solo durante la infancia, sino también en la juventud, la época adulta y la tercera edad.
Por eso es muy importante que en la dieta de los peques no falten alimentos para fortalecer el sistema inmunológico que aumenten sus defensas, cuiden la salud y llenen su organismo de energía y vitalidad.
En Wikiduca hemos recopilado algunos de los ingredientes más apropiados para reforzar el sistema inmunológico para que podáis incluirlos en su alimentación desde hoy mismo.
Alimentos para fortalecer el sistema inmunológico de los niños
Recordad que es fundamental combinar estos alimentos para fortalecer el sistema inmunológico de los niños con otros ingredientes sanos y nutritivos y dejar a un lado las frituras, las grasas saturadas y las bebidas con gas para que los pequeñines gocen de una excelente salud.
La leche materna
Si vais a tener un bebé dentro de poco o vuestros hijos todavía son recién nacidos, desde Wikiduca os animamos a apostar por la lactancia materna debido a sus múltiples beneficios para la salud de los niños.
Y es que la leche procedente de la madre se compone de elementos capaces de fortalecer el sistema inmunitario de los peques y de prevenir enfermedades no solo durante la infancia, sino también en la etapa adulta. Además, la leche materna también es magnífica para:
- Prevenir la aparición de alergias al impedir que los alérgenos que las provocan penetren en el organismo del recién nacido.
- Llenar el cuerpecito de los niños de un sinfín de vitaminas y proteínas.
- Impedir que las enfermedades respiratorias y las dolencias digestivas se instalen en el organismo de los pequeños.
- Reducir las probabilidades de padecer sobrepeso y obesidad, dos afecciones que pueden resultar muy perjudiciales para la salud del corazón.
Las frutas y verduras frescas
Las vitaminas que suelen tener más presencia en las frutas y verduras frescas son la A y la C, ambas ricas en antioxidantes capaces de combatir los radicales libres, de retrasar el envejecimiento, de fortalecer el sistema inmunológico de grandes y pequeños y de evitar la aparición de muchísimas enfermedades.
Aunque todas las frutas y verduras frescas poseen beneficios para la salud de los niños, algunas de las más apropiadas para cuidar su cuerpecito son la zanahoria, el pepino, la lechuga, el tomate, el pimiento, la naranja, el kiwi, la fresa, el melón, la pera y la manzana, entre otras muchas.
Podéis animarles a consumir dos o tres piezas de estos ingredientes a diario, incluirlos en sus papillas y purés o transformarlos en saludables smoothies si vuestros hijos ya son un poco más mayores.
Los cereales
Si estáis buscando alimentos para fortalecer el sistema inmunológico de los niños no os podéis olvidar de los cereales, ya que son hidratos de carbono ricos en minerales, vitaminas, fibra y proteínas.
Gracias a estas sustancias los peques que consumen cereales a diario o varias veces a la semana pueden gozar de unos huesos fuertes, crecer sanos, sentirse enérgicos durante todo el día, disfrutar de una buena salud digestiva y estimular su desarrollo cognitivo.
Podéis incluir los cereales en el desayuno de los peques junto a un delicioso vaso de leche o, si lo preferís, mezclarlos con yogures naturales o de los sabores que más les gusten.
Las legumbres
Lentejas, garbanzos, guisantes, alubias, judías verdes… Son muchas las legumbres que se pueden incluir en la dieta de los pequeñines de la casa.
Y es que la gran mayoría de ellas contienen metionina, un aminoácido que no puede faltar en la alimentación de niños y adultos debido a que estimula la descomposición de las grasas, previene el sobrepeso, facilita la expulsión de metales pesados y protege los músculos.
Cabe destacar, asimismo, que las legumbres también son ricas en hierro y fibra, por lo que incluirlas en la alimentación de los peques dos o tres veces por semana les ayudará a mejorar el tránsito intestinal y a gozar de grandes dosis de energía y vitalidad.
¿Os resulta muy complicado conseguir que los pequeñines se comen los platos de legumbres? En ese caso podéis recurrir al hummus, que se prepara con garbanzos y resulta del agrado de muchos niños, implicar a los chiquitines en la preparación de las legumbres o crear caras sonrientes con los guisantes, las judías y los garbanzos para que los platos sean más atractivos y apetecibles, por ejemplo.
Los frutos secos
Los frutos secos son pequeños tesoros de la naturaleza y unos ingredientes perfectos para fortalecer el sistema inmunológico de los niños.
¿La razón? Que contienen magnesio, cobre, selenio, zinc y vitaminas A, D, E y K; todas ellas unas sustancias estupendas para mimar el corazón, retrasar el envejecimiento del organismo, reducir los niveles de colesterol malo y prevenir la diabetes e, incluso, algunos tipos de cáncer.
Recordad, no obstante, que es importante consumirlos en pequeñas dosis, por lo que una buena idea puede ser hacer que los pistachos, las castañas, las avellanas, las almendras o las nueces estén presentes en la merienda de vuestros chiquitines junto a un rico yogur, una pieza de fruta o unas deliciosas tostadas, por ejemplo.
¿Forman estos alimentos para fortalecer el sistema inmunológico de los niños parte de la dieta de vuestros hijos? Si no es así recordad que se trata de unos ingredientes fabulosos para lograr que los niños crezcan sanos, fuertes y con una salud de hierro.