Cada vez son más los estudios que demuestran que el ejercicio físico no solo es capaz de mejorar la apariencia y el funcionamiento del corazón, sino también la salud emocional y la felicidad de pequeños y mayores.
Según el doctor John Ratey, de la Universidad de Harvard, son muchas las investigaciones que han dejado de manifiesto que el ejercicio físico nos ayuda a regular la parte emocional de nuestro cerebro y a potenciar la felicidad.
¡Una noticia que ha dejado fascinados a todos los miembros de Wikiduca, ya que nos encanta hacer felices a los papás, niños y maestros con nuestros consejos, trucos y juegos educativos!
Por eso hoy hemos querido destacar que el mero hecho de practicar deporte nos permite tanto cuidar la salud como aumentar el buen humor y la felicidad. ¡Estos son sus beneficios para la salud emocional!
Regular el estrés
Cuando realizamos ejercicio físico nos concentramos en la actividad que estamos llevando a cabo, ya sea bailar, correr, caminar o hacer escalada, por ejemplo.
Este hecho nos permite olvidar las preocupaciones y los acontecimientos más estresantes y angustiantes de nuestro día a día, lo que nos da la oportunidad de ser más felices.
Potenciar el bienestar
El deporte hace posible que el cerebro libere serotonina, dopamina y endorfinas, unos neurotransmisores que mejoran la salud física y mental y que traen consigo una sensación de euforia y bienestar de lo más placentera para el organismo.
Aumentar la motivación
Cuando practicamos ejercicio físico nos sentimos mejor y mucho más enérgicos, lo que se traduce en una mayor motivación para seguir haciendo deporte y para realizar otras muchas actividades al estar animados y llenos de vitalidad.
Mejorar el desarrollo cognitivo
El hecho de recordar los mejores momentos de nuestra vida nos ayuda a sonreír y a ser más felices.
Pero, para gozar de una buena memoria, es fundamental llevar una dieta sana, recurrir a juegos que potencien la agilidad mental tales como los sudokus, los puzles o el juego de cartas de Wikiduca; y practicar ejercicio físico.
Y es que el deporte también es capaz de mejorar el desarrollo cognitivo y de equilibrar las sustancias cerebrales que previenen la aparición de enfermedades mentales tales como el Alzhéimer.
¿Un buen truco para que no os dé pereza hacer ejercicio? Entrenar el cerebro y fomentar el positivismo pensando en las virtudes del deporte y recordando que es la excusa perfecta para reflexionar y disfrutar de unos instantes de soledad, de música o de aire puro.
¡Animad a vuestros hijos a asociar el ejercicio físico con pensamientos positivos y se convertirán en grandes amantes del deporte!