Cuando la Navidad se acerca, los padres se ponen manos a la obra para encontrar los regalos idóneos para sus hijos, y cada vez son más los que deciden aprovechar las ventajas de los juguetes ecológicos.
Gracias a ellos, los más chiquitines lo pasan en grande, disfrutan de momentos muy divertidos tanto en solitario como en compañía de su familia y, además, contribuyen a mejorar la salud del planeta Tierra.