Las películas infantiles suelen acaparar gran parte de la cartelera de los cines durante los meses de verano debido a que los peques están de vacaciones.
Además, muchas veces las elevadas temperaturas propias de esta estación del año no solo invitan a ir a la playa y a la piscina, sino también a disfrutar del frescor del aire acondicionado de las salas de cine y de una bebida muy fresquita.